domingo, 11 de mayo de 2014

Mitos y verdades sobre implantes mamarios



Mitos y verdades sobre implantes mamarios


A pesar del hecho de que las cirugías de aumento mamario constituyen una opción segura y popular entre las mujeres para mejorar su contorno corporal, existen aún muchos mitos en lo referente a este procedimiento
1-   Los implantes mamarios pueden interferir con la lactancia
Falso, este es uno de los mitos mas populares, tanto sea que los implantes pueden interferir con la lactancia, como que la lactancia puede tener efecto sobre los implantes mamarios. Es importante explicarle a las pacientes que aquellas mujeres con un estado de salud bueno y en condiciones de dar de lactar a sus hijos no experimentaran modificaciones en su capacidad de lactancia. Del mismo modo la lactancia no tendrá efectos sobre los implantes a diferencia del efecto que el cambio hormonal pueda tener sobre las glándulas mamarias y el cuerpo en general.

2-   Las mujeres mayores deberían evitar las cirugías de implantes mamario
Falso, el único factor que hay que considerar en una mujer mayor es su estado de salud. Si están en condiciones de sobrellevar una cirugía, no importa que tengan 20 o 60 años, el beneficio será por igual para ambas

3-   Los implantes mamarios pueden interferir con las mamografías
El cáncer mamario es un tema de preocupación para las mujeres en general. Las pacientes deben saber que con las técnicas y equipos modernos la visualización mamaria en pacientes con implantes prácticamente no presenta diferencia con aquellas que no los tienen. En aquellas pacientes que tengan dudas la colocación de un implante en posición submuscular aumenta aun la distancia con la glándula disipando cualquier duda en cuanto a la realización de estos estudios

4-   Las pacientes con implantes no deben usar corpiño con aro
Si bien este mito tiene un origen desconocido, muchos consideran que se ha originado por el hecho de que muchas mujeres comienzan a usar corpiño con aro en forma cercana a la cirugía pudiendo sentir algún tipo de disconfort. En general se le explica a la paciente que puede utilizar este tipo de prenda una vez que la cirugía ha completado su periodo de cicatrización

5-   Los implantes mamarios deben ser cambiados cuando vence la garantía
Si bien es algo que generalmente no se habla en muchas consultas es un tema que inquieta a las pacientes que tienen implantes de algunos años. La cuestión es que por un tema legal las compañías dan cierto grado de garantía sobre la calidad del producto a implantar, lo cual implica que por un determinado periodo (generalmente 10 años) y bajo condiciones normales, es decir ausencia de traumatismos o patología en la región mamaria, estos implantes no debería sufrir ningún cambio. Esto no quiere decir que pasado dicho periodo la paciente deba ser sometida a una nueva cirugía, pero debe estar consciente de que, en algún momento, el material de ese implante va a sufrir un desgaste progresivo que hará recomendable el considerar la posibilidad de efectuar un recambio. Del mismo modo cualquier paciente en su post adolescencia que se someta a una cirugía de implantes mamarios, debe saber que por lo menos una o dos veces en su vida deberá someterse a una cirugía de recambio. Por este motivo es importante que la cirugía inicial sea efectuada por un especialista en cirugía plástica y no por profesionales de otras especialidades, o sin experiencia en el tema,  lo cual pueda llevar a un mayor índice de complicaciones. Se puede conocer una nómina de profesionales certificados consultando las páginas de las sociedades científicas locales como www.sacper.org.ar
www.claudiosaladino.com.ar

sábado, 26 de abril de 2014

Cirugias estèticas en adolescentes

Dr Claudio Saladino, especialista en cirugia plastica

Cirugia estetica en adolescentes


Articulos recientes hablan de un incremento en la demanda de procedimientos estèticos en pacientes de cada vez más baja edad, cuando hasta hace unos años este tipo de cirugías estaban reservadas a personas a partir de sus 30 años.

En algunas publicaciones se habla de adolescentes que solicitan y reciben como regalo de 15 años una cirugía de implantes mamarios o una lipoaspiración. Esto se suma a una demanda clásica de ciertas cirugías en pacientes de esta edad ( generalmente rinoplastias o auriculoplastias). El origen de este cambio se puede en parte atribuir a la influencia de los medios, en los que se promocionan a celebridades jóvenes con atributos físicos determinados los cuales tienden a ser rápidamente copiados por sus jóvenes seguidores. Por otra parte la banalización por parte de los medios de lo que constituye una cirugía estética, hace que estos procedimientos no sean vistos como una cirugía, con los riesgos inherentes a las mismas, sino como un tratamiento cosmético ambulatorio convencional.

En nuestro medio hay que distinguir los grupos de pacientes por debajo de los 18 años, aquellos comprendidos entre 18 y 21 y los mayores de esta edad. En el primer grupo afortunadamente no es significativa la demanda, a excepción de consultas por rinodeformidades, las cuales en casos excepcionales se puede efectuar a partir de los 16 años o cuando el paciente se haya desarrollado físicamente. Otra excepción la constituyen los pacientes que consultan por deformidades auriculares, cirugía que tradicionalmente se ha aceptado efectuarla en edad escolar, en aquellos casos en que el paciente es burla de sus pares. No es significativa la consulta por aumento mamario y tampoco lógico acceder a la misma ya que la paciente en general no ha alcanzado su desarrollo físico. Se entienden como excepciones aquellos casos de malformaciones mamarias como el Síndrome de Poland ( ausencia de glándula mamaria y musculo pectoral, generalmente unilateral). En el grupo de 18 a 21 ha habido en los últimos años una mayor demanda en lo que respecta a cirugías de aumento mamario. Cabe destacar que además de contar con el aval de un mèdico ginecólogo, las pacientes necesitan el consentimiento escrito de sus padres. En menor frecuencia le siguen las consultas por lipoaspiraciones o cirugías de nariz. En aquellos casos en que la consulta es por reducciones mamarias se hace hincapié expresamente en el hecho de una posible interferencia con la lactancia en un futuro y, de efectuarse, se opta por técnicas especiales que tienen un menor compromiso de la misma.
Por ultimo en el grupo de pacientes mayores de 25, se suma como motivo de consulta el de la gluteoplastia, sea mediante implantes o lipotransferencia.
Un procedimiento que es solicitado cada vez más frecuentemente,  es el de la bichectomia o resección de la bola de Bichat. Esta cirugía consiste en resecar, por una incisión por dentro de la boca, compartimientos grasos de la mejilla con el propósito de afinar los rasgos faciales.
En todos los casos es sumamente importante que los pacientes de  estas características efectuen la consulta con un profesional certificado (con título de especialista) si es posible con pertenencia a alguna de las sociedades científicas locales ( Sociedad de cirugía plástica argentina SACPER, Sociedad de Cirugia Plastica de Buenos Aires SCPBA, etc) a fines de evitar caer en manos de profesionales inescrupulosos